Argumento
Cosme, en estado de semilocura, no permite que nadie le vea dormir por miedo a
hablar en sueños. Ha roto todos los espejos de la casa y tampoco permite que se le llame por su nombre.
Cuando Laura, su mujer se dirige a él como “Cosme” el replica; “no, sino el otro”.
Ante las preguntas de Ernesto, neuropsiquiatra y hermano de Laura, Cosme le cuenta lo sucedido:
Estando en caso se vió aparecer a sí mismo por la puerta y tras entrar en un estado de inconsciencia, despertó frente a su propio cadaver.