La Casa de Bernarda Alba, considerada como el drama formalmente más perfecto de todo el teatro español contemporáneo, refleja sentimientos enconctrados que dan origen a un mundo de falsas apariencias, odios y envidias. La autoridad, la falsa moral y la envidia, los celos, las pasiones, el amor, las mentiras, el silencio... se dan cista para crear un clima que acaba atrapando al espectador.
En esta propuesta, destaca la escenografía e iluminación de Paco Azorín, que ha reinterpretado el encerramiento que propone Lorca, plasmándolo en un código de barras contribuyendo, así, a actualizar la historia. Es un elemento muy contemporáneo y en este caso representa a la cárcel del siglo XXI, una que no tiene puertas, pero de la que igualmente no se puede salir, ya que más bien consiste en un bloqueo mental y social. "La cárcel de hoy no tiene ni rejas ni paredes; se parece más a la de El ángel exterminador de Buñuel: está en nuestras cabezas".
El espectáculo se programó el pasado 10 de agosto en el Festival de Sagunt a Escena y se podrá ver antes de Madrid los días 1 y 2 de septiembre en el propio Teatro Gayarre de Pamplona.
El reparto cuento con destables actrices del momento: Marta Juániz (Bernarda), Emi Ekay (Poncia), Maiken Beitia (Angustias), Carol Verano (Magdalena), Leire Barkos (Amelia), Belén Otxotorena (Martirio), Leire Ruiz (Adela) y Pilartxo Munárriz (María Josefa).