Argumento
Dicen que el choque permanente entre la ilusión y la realidad caminan pararelo al devir de los pueblos. Y las historias que pasan de abuelos a padres y de padres a hijos casi siempre esconde un tesoro: fantasías que aún nos dejan soñar un poco, luciérnagas de espíritu, pedacitos de esperanza recogidos de un arrebato, sin pensarlo dos veces.
Y para seguir viviendo hacemos nuestros todos esos cuentos de abuelos. A pie tejemos el camino de dulces deseos mezclados, inexorablemente con los hilos de la realidad.