¿Cuántas veces se dice que se odia a alguien? ¿O se desea su muerte? ¿O incluso se le pega, se le humilla, insulta, se le amenaza? Nos escupimos, nos amenazamos, nos insultamos, forcejeamos, gritamos. Corre un poco de sangre, uno triunfa, el otro destrozado en la puerta del cuarto de baño suplicando perdón.”
En una obra casi de intriga, con tintes psicológicos y humor inteligente Bergman nos introduce en el mundo de Peter y Katerina, una pareja de gente alrededor de 50 años, que de pronto se tienen que enfrentar con la terrible sensación de haber desperdiciado su vida en las apariencias, descuidando por completo su vida espiritual y emocional.