Espectáculo de microteatro concebido para bares y cafés, en el que una exótica,
extravagante y muy histriónica mujer, representada por un títere pitonisa, ejerce el
“don de la adivinación”, acompañada por su fiel (o no tan fiel) ayudante. El público
participa de forma activa y personal al ser invitados a la mesa para que Carmela les lea la mano, adivine su futuro y saque todo el jugo posible. Entre invitado e invitado hay espacio para interpretaciones musicales teatralizadas.