Una roca acoge su cuerpo incapaz de dormir. En esa
imposibilidad, en esa incapacidad de conciliar el sueño,
otros cuerpos la acompañan. Cuerpos de mujeres que
pertenecen al mundo de la vigilia, cuerpos de mujeres de
su familia, cuerpos de mujeres a lo largo de la historia,
cuerpos de mujeres sin nombre que la empujan, la
mecen y la despiertan.