CON EL MIEDO SUFICIENTE PARA PODER SER VALIENTE
¿Quién podría imaginar a tres personas de 80 años, que justo cuando iban a acostarse, saltarían a un tren en marcha, cantarían al ritmo de una basurera de ideas… o acabarían en comisaría acusadas de la muerte de su mejor amiga?
Prejuicios, falsos mitos e inseguridades se transforman en fuerza, pasión y aventura.