Cinco abrazos sobre el paisaje

Echedey y David en uno de los rincones de la isla qué los vio crecer; ambos amigos hace mucho tiempo que no se ven. A David le ha sonreído la vida y tiene dinero para invertir. Quiere montar un pequeño hotel y está buscando el espacio ideal en el que empezar a construirlo. Enseguida se da cuenta de que ese lugar, en el que tan feliz ha sido junto a su amigo, es idóneo para lo que tiene en mente. Cuando se lo cuenta a Echedey, éste pone el grito en el cielo: ¿cómo echar cemento sobre un paisaje lleno de recuerdos?
No lo va a consentir.
Pero a Echedey las cosas no le han ido tan bien y el hotel podría acercarse al éxito con el que siempre había soñado.
¿Qué hacer?
Los ladrillos comienzan a taponar el paisaje y el hotel cada vez es más grande.
Ya no hay marcha atrás.