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El CDN estrena 'Realidad', de Tom Stoppard

25 enero 2010
Llega al Teatro María Guerrero una de las obras más esperadas de la temporada

El Centro Dramático Nacional estrena el 28 de enero el montaje La realidad, esperada obra de Tom Stoppard que podrá verse en el escenario del Teatro María Guerrero hasta el 7 de marzo con un destacado elenco de intérpretes como Arantxa Aranguren, Javier Cámara, Juan Codina, Patricia Delgado, Alex García, Jorge Páez y María Pujalte bajo la dirección de Natalia Menéndez.


Tom Stoppard es un brillante dramaturgo británico de origen checo, conocido especialmente por obras de teatro como La costa de Utopía (The Coast of Utopia), Realidad (The Real Thing), Rosencrantz y Guildenstern han muerto (Rosencrantz and Guildenstern are Dead), Rock ‘n’ Roll y por guiones de cine. Precisamente, Stoppard obtuvo el Óscar al mejor guión original en el año 1998  por la película Shakespeare  in Love, dirigida por John Madden. Además, también es autor de los guiones de películas como The Romantic Englishwoman, Despair, The Human Factor, Brazil, The Empire of the Sun, The Russian House o Billy Bathgate.


La versión de Realidad (The Real Thing) es obra de  Juan V. Martínez Luciano, que no duda en catalogar a Stoppard como “uno de los mejores dramaturgos en lengua inglesa de la segunda mitad del siglo XX. Y Realidad es no sólo una de las mejores obras de Stoppard, sino, probablemente, una de las mejores piezas dramáticas del teatro británico de los últimos años del siglo XX”.


Martínez Luciano explica que el público encontrará en esta obra muchas de las características de la escritura stoppardiana, “y muy especialmente los diferentes niveles de «teatro dentro del teatro» que, si bien presentes en muchas de sus obras, son utilizados aquí de forma magistral”. Igualmente, el autor considera que podría afirmarse que muchas de las obra de Stoppard giran en torno a esa idea de encontrar la naturaleza de la realidad, de lo que es verdadero: “La diferencia estriba, a lo largo de su producción dramática, en el concepto a debatir: el arte, la filosofía, la literatura–dramática, en el texto que nos ocupa–, el periodismo, la política y la libertad de  expresión o, como en este caso, la naturaleza del amor y las relaciones personales en diferentes contextos”.


En su reflexión, Martínez Luciano dice que a través del personaje de Henry se podría afirmar que “encontraremos también en Realidad los primeros, y quizá los únicos, atisbos de autobiografía que Stoppard se atreve a introducir en toda su producción teatral”. A través de Henry, continúa, el autor hace plantearnos “la utilidad del arte en general (literatura, música), y de la escritura dramática en particular– el autor plantea, al menos en parte, su vida, su obra y, sobre todo, referencias al oficio de escritor, de dramaturgo. Porque, desde el punto de vista argumental, Realidad habla sobre el amor y el sexo, pero también sobre la literatura, el arte y la ilusión, la  sinceridad y el desengaño, los sentimientos y su negación, en un trabajo con múltiples facetas empeñado en desentrañar lo que de espejismo tiene a veces la realidad”.


“Y quizá también, por ese carácter autobiográfico, encontraremos en la obra elementos que nos hacen pensar en Stoppard como un autor comprometido políticamente, o que, al menos, intenta cuestionar algunas de las posturas más radicales de otros dramaturgos contemporáneos”, comenta Martínez Luciano.


Finaliza Juan V. Martínez Luciano afirmando que, de entre las muchas opiniones o lecturas que el espectador puede extraer de Realidad, “quizá esta reflexión sobre el valor de las palabras, sobre la utilidad del lenguaje, sea, desde nuestro punto de vista, uno de los aspectos más significativos de la obra. Una obra, en suma, que como afirmó el prestigioso crítico Michael Billington, en The Guardian, y nos parece una acertada y oportuna conclusión “combina la complejidad estructural con el dolor y la pasión”.

Más información en www.cdn.mcu.es

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