Las obras de renovación afectarán al foso, escenario, motores e iluminación
El Ayuntamiento de Bilbao aprovechará el parón veraniego para acometer obras de mejora en el Teatro Arriaga, que con esta intervención verá como se renueva entre bastidores adaptando su foso, escenario, motores e iluminación a los últimos avances tecnológicos y a las necesidades derivadas por la frecuencia de su uso.
Las obras se han previsto para el mes de julio, con le objeto de que le espacio escénico pueda abrir sus puertas a una nueva temporada teatral a finales de ese mismo mes. El Teatro Arriaga ha sufrido ya en los últimos años diversas renovaciones, la última remodelación integral data de 1986, aunque en años posteriores se han llevado a cabo varias obras de mejora.
En primer lugar, las obras afectarán a la remodelación del foso de orquesta, una de las infraestructuras más importantes del escenario y que consta de tres alturas graduables. Después de 23 años de uso cuenta con un cuadro eléctrico obsoleto que se sustituirá su cuadro de control, cableado y los cinco motores existentes. Así, el foso dispondrá de un sistema de elevación adaptado a las necesidades actuales.
Por otra parte, el suelo del escenario, algo deteriorado por las escenografías más pesadas, experimentará una renovación completa. Sus 192 trampillas de madera de roble serán sustituidas por otras nuevas, del mismo material. Los motores de la parte superior, encargados de mover los telones, también se renovarán. Con estas obras de renovación se retirarán los actuales, ya obsoletos, y se sustituirán por otros que permitan mover hasta una tonelada de peso.
Finalmente, la última reforma hace referencia a la iluminación actual, que se remplazará por un sistema de focos robotizados de última generación que permitirán realizar ángulos y zooms más amplios y una mayor calidad de la luz, eliminando el ruido.