Hay una gran verdad tras la frase: “Este es un pequeño paso para el hombre, un gran salto para la humanidad”. Y no es válida solamente en situaciones extraordinarias como viajar al espacio. Muchos pequeños gestos cotidianos construyen hermosas y fructíferas gestas cotidianas.
Planteamos un hipotético viaje al 21 de julio de 1969, cuando todo el mundo estaba pendiente de una gran hazaña. Pero ¿qué estaba ocurriendo aquí en la Tierra? Esta es una historia humana, poética, de personas que, lejos de pisar la luna, muestran la belleza y la celebración de la vida, con sus luces y sombras, con sus fortalezas y fragilidades. Vieron como un día, por primera vez, un hombre pisó la Luna. Comienza la cuenta atrás para llegar al mar de la