COMPAÑÍAS Y DISTRIBUIDORES

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Laila Tafur trabaja mayormente sobre las fronteras, entre la imagen y la acción, el performance o la instalación. Usando el cuerpo como herramienta que trasciende el campo físico y teórico. Su bagaje es prácticamente el de cualquier bailarín, desde el ballet clásico al movimiento no técnico, manteniendo despierta las preguntas “amateur vs profesional”, “bien hecho vs mal hecho”, “correcto vs incorrecto”. Su carrera se ha desarrollado entre Reykiavik, Berlín, Lisboa, Copenhague, Barcelona, Ibiza y Granada, recogiendo así una larga lista de habilidades, experiencias, hábitos e información alrededor de las cuestiones qué es performar o hacia dónde va la danza, pero en sus propias palabras: “No he encontrado ninguna respuesta por ahora… Tal vez fuera de
Europa, en un lugar sin memoria sobre danza contemporánea, en un sitio fresco” .
Desde 2010 ha centrado su búsqueda en la experimentación y re-interpretación del flamenco. Tras la participación en el XVII Festival de Flamenco Ciutatvella de Barcelona con la pieza “Martinete y Caballería”, la intensidad del trabajo de búsqueda y experimentación a través el flamenco y sus terrenos artísticos colindantes, ha ido creciendo y extendiéndose. Sus dos últimas piezas “Camarón vs M. Jackson” o “Mi arma” se centran en este trabajo, y ambas piezas giran actualmente por diversos festivales de flamenco y contemporaneo.
Esta dos piezas son la digestión de los últimos años de trabajo, de viajes y estancias lejos de su tierra, de celebrar y huir de su añoranza. De ahí nació el interés por revisar y revisarse en el flamenco. Este interés por recuperar lo que una vez definió su identidad, por recoger y reinterpretar la cultura de la que viene, ha llegado ahora a un punto aun mas complejo. Las asociaciones ya no juegan solo a los encuentros entre su bagaje contemporáneo y unas raíces andaluzas cargadas de recuerdos del Sacromonte y sus zambras. Hay ahora otros elementos que quieren también formar parte de este juego de asociaciones y cruces, las nuevas tierras que la han acogido. Y ahí
es donde se encuentra ahora, en un intento por cruzar sus raíces, llenas de Camarones y Morentes; el performance y la danza contemporánea como su elección de vida, y el paisaje como experiencia y fuente de inspiración.
Su formación comienza en Granada, ciudad de la que es natural, en el año 1997 donde se introduce y educa en la danza clásica durante seis años. En 2003, se traslada a Ibiza dónde estudia flamenco con Teresa Rojas, con la que desde entonces ha establecido colaboraciones frecuentes, tanto con la bailaora como con su escuela.
En el año 2005 viaja a Barcelona y comienza su licenciatura en Coreografía en el Institut del Teatre. Allí entra en contacto con la danza contemporánea y se educa con grandes teóricos del performance y la escena como Roberto Fratini, Victor Molina o Joan Baixas, que le abren una nueva perspectiva sobre el alcance de la danza y la introducen en la actividad preformativa. También en Barcelona (no solo al Institut) entrena el cuerpo con profesionales nacionales e internacionales como Andres Corchero, Angels Margarit, Lipi Hernandez, Thomas Hauert, Yumiko Yoshioka, Juschka Weiguel o Meg Stuart.
En 2009 Laila se muda a Islandia, Reykiavik, donde es acogida como invitada por un año en la Universidad de Arte de Islandia, en el departamento de danza. Allí entra en contacto con bailarines y profesionales de la escena contemporánea, Erna Omarsdottir, Salva Sánchez, Antón Lachky o Rasmus Ölme, Tony Vezich o Roberto Olivan, entre otros. También allí establece contacto con los paises nordicos, con los que mas tarde colaborará en diversos proyectos y desarrollará los propios. En 2010/2011, se muda aLisboa en calidad de estudiante de intercambio con la Universidad Politenica de Lisboa, donde cotinua su entrenamiento físico y profundiza en sus trabajos y proyectos.

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